Hooooola lectores de Mario y sus dulces!!!
Hoy os traigo una receta de una tarta que está muy de moda desde hace algunos meses. Os estoy hablando de la conocidísima CARROT CAKE, o tarta de de zanahoria, para los que nos gusta la sencillez! Hehehe!
Esta tarta se volvió muy conocida hace ya algún tiempo.
El impacto fue grande porque aquí no estamos muy acostumbrados a hacer tartas que no sean estrictamente dulces. Nos sacan del chocolate, la nata, la fresa y la vainilla... y nos perdemos! Podéis confesarlo, a mi hasta hace muy poquito me pasaba lo mismo! LO ADMITO! Hehehe!
Me daba un poco de reparo preparar esta tarta, nunca la había hecho antes, y por lo que iba leyendo por diferentes blogs, muy fácil muy fácil no era. Pero ya sabéis que en la repostería me gusta ser atrevido y lanzarme con recetas nuevas, por muy complicadas que me parezcan!
El resultado me gustó mucho. Raro en mi, soy mi peor crítico, los que me conocen bien lo saben! Pero de la CARROT CAKE salí contento!
Los ingredientes son muy sencillos y seguro que los tenéis en casa.
Ingredientes:
- 250gr de Zanahorias
- 3 Manzanas medianas
- 200gr de Harina
- 180gr Azúcar moreno
- 3Huevos
- Un poquito de Levadura
- 180ml de Aceite
- Unas pasas
- Una pizca de Canela
Las zanahorias y las manzanas de pican en la picador eléctrica, no hace falta hervirlas, se cocinan en el horno junto con el bizcocho. Y ya sabéis, el aceite con los huevos y el azúcar, y luego vamos agregando la harina, la canela y la levadura. Cuando todo esté bien integrado, incorporamos las zanahorias y las manzanas picadas, y unas poquitas pasas, esto es opcional, pero le da un toque diferente al morder.
Precalentamos el horno a 175ºC
Engrasamos un molde de unos 22cm de diámetro con mantequilla y vertemos la masa en él. Y con el horno ya caliente, horneamos durante 30 minutos. Una vez horneado, lo sacamos del horno, pero esperamos a que se enfríe para desmoldarlo. Cuando ya esté frío, lo envolvemos en papel transparente film y a la nevera una horita.
Y para la crema que lo cubre:
- 250gr de Queso crema
- 250gr de Azúcar Glasé
- 100gr de Mantequilla a temp. ambiente
En el bol de la batidora, mezclamos el azúcar glasé con la mantequilla a temperatura ambiente. Cuando esté la crepita blanca... añadimos el queso crema y batimos con las varillas a velocidad un poco alta, hasta que nos quede bien, bien cremoso!
Sacamos el bizcocho del horno, y con ayuda de la lira lo abrimos.
Y vamos colocando la crema encima de una de las mitades, y colocamos la tapa, y repetimos el proceso, repartiendo el resto de la crema cubriendo todo el bizcocho.
Una vez cubierto, podéis ser creativos y decorar de una forma divertida y muy vistosa la tarta. Yo he hecho mini zanahorias con fondant y las he colocado encima, de esta forma hay contraste en lo blanco de la crema que cubre el pastel, y los colores vivos de las mini zanahorias.
Y al corte, cuando sirváis una porción a vuestos amigos o familia... queda muuuuy bonito en el plato, con una mini zanahoria, el blanco de la crema y el color del bizcocho.
Espero que os haya gustado esta receta taaaanto como a mi y a los clientes del restaurante, que se la han terminado en tiempo récord!
Porque la vida sin dulces... no es vida!!!
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